Director: Terrence Malick
Duración: 170 minutos
País: Estados Unidos
Elenco: Nick Nolte, Jim Caviezel, Sean Penn, Elias Koteas, Ben Chaplin, Dash Mihok, John Cusack, Adrien Brody, John C. Reilly, Woody Harrelson, Miranda Otto, Jared Leto, John Travolta, George Clooney, Nick Stahl, entre otros.
" Adaptación realizada por Terrence Malick de la novela autobiográfica del mismo nombre escrita por James Jones, que se centra en el conflicto ocurrido en Guadalcanal durante la Segunda Guerra Mundial."
No entraré en detalles en absoluto, ni me detendré a comentar si la película es más o menos aburrida. Primero, porque ese aspecto puramente ocioso me interesa sinceramente muy poco; y en segundo lugar porque es excesivamente relativo ya que hay gente que se divierte viendo la saga de Twilight, toda una tarde, lo que a mí me provocaría un enorme fastidio. Mejor voy con la película.
Terrence Malick es una especie de filósofo y humanista lo cual es maravilloso, pero al mismo tiempo le lleva a no abordar de forma correcta algunos temas como la violencia y la guerra. Su visión de la naturaleza es idílica, cuando es todo lo contrario, y su forma antropológica de ver a los pueblos aborígenes se acerca al mito del buen salvaje. Es la pura imagen de un hombre que sigue el mito progresista que el hombre es bueno por naturaleza, él mismo llega a afirmar la bondad que nos fue otorgada.
Este fue el regreso de Malick al cine después de 20 años, ese señor que ha hecho alrededor de seis películas en más de cuarenta años y aun así está considerado uno de los mayores norteamericanos vivos. Se trata de una película bélica más bien atípica, ya que deja de lado las batallas, de la acción y todo ello, para usar más bien la guerra como excusa para hacer diversas reflexiones filosóficas sobre el hombre, la naturaleza o el sentido de la vida. Constantes pensamientos internos de los personajes interrumpen lo que sería el ritmo cinematográfico normal, y es mejor hacerse a la idea pronto y no ver la cinta esperando a que ocurran las cosas, por así decirlo.
Con toda la controversia que siempre pueden levantar este tipo de creaciones, y al margen de que la música y sobre todo la fotografía están por encima de la media (pocas veces se habrán visto resultados tan pictóricos en una obra de Hollywood), la película me gustó y me conmovieron los innumerables pensamientos que pasan por la cabeza de estas personas, que de repente se ven inmersos en una situación que podría significar su muerte. Eso de la poesía es muy subjetivo, pero cabe señalar, que a pesar de su evidente lentitud me parece una buena película.
El relato se apoya en varios narradores y se desarrolla desde perspectivas diversas, que corresponden a diferentes personajes. Los puntos de vista que predominan son los del soldado Witt y del capitán Staros. La voz en off explica, esencialmente, los pensamientos y sentimientos que viven los protagonistas, su visión subjetiva de los hechos, las experiencias y opiniones diferentes de los mismos y sus variadas reacciones durante una prolongada y extenuante situación limite, en la que emergen factores tan contradictorios como instintos primarios de supervivencia, tendencias de agresividad casi compulsiva y pensamientos religiosos acompañados de dudas e incertidumbre.
El relato, pese a su dureza y contundencia, se presenta pausado, tratado con moderación y dignidad. Las imágenes se vuelven más lentas en algunos momentos, la cámara permanece alejada de algunas escenas, el sonido desaparece a veces y con frecuencia la música ahoga registros hirientes, casi siempre gritos de dolor. Las escenas de acción y de guerra son vibrantes y realistas, a pesar de algunas simplezas y disimulos como niebla localizada en el lugar de la acción, humo o cierta vegetación. A pesar de todo ello, el director incorpora puntualmente visiones dolorosas y perturbadoras, suavizadas de alguna manera. Y es que está abstraído en estilizar los hechos, echando mano para ello, por ejemplo, del uso de numerosas elipsis. Una elipsis por definición es una omisión en una frase de una o más palabras sin alterar el sentido de dicha frase. En lenguaje cinematográfico, una elipsis se refiere a un salto en el tiempo o en el espacio. De tal manera que el espectador no pierde la continuidad de la secuencia aunque se hayan eliminado los pasos intermedios.
Es notable la cuidada y apasionada estética de la obra. Malick nos muestra a la naturaleza de una manera plácida, acogedora, exquisita, abundante. Rinde alguna clase de homenaje al paisaje, al mar, a la vegetación, a los animales en libertad, a los niños que son los símbolos de la inocencia y los pobladores autóctonos. Destaca la atención que presta a los animales del lugar, incluido aquel que emprende el vuelo atemorizado por la presencia de los soldados. Los niños por su parte, reaccionan ante ellos de modo similar: interrumpen los juegos y con cautela se ponen a salvo.
La película establece que la guerra, cruel y devastadora como es, no sólo es esencialmente perversa por sí misma y por sus consecuencias, sino que es una afrenta a la razón, al orden natural de las cosas, a la naturaleza y al espíritu panteísta que palpita en su esplendor y grandeza. Porque en la propia naturaleza también hay violencia y crueldad. Nos lo recuerda a través de ciertos animales salvajes, advirtiendo que la violencia natural se ve condicionada y limitada por el equilibrio de las especies y de sus relaciones con el medio. Por otro lado, la violencia humana no conoce límites, ni condiciones, ni reglas. En ella habitan la maldad, la locura y tendencias absurdas que apuntan hacia la autodestrucción. La guerra embrutece, bestializa, degrada y enajena a las personas. La guerra en su furor destructivo también acaba con la inocencia.
Al final surgirá una nueva vida, un renacido ciclo vital. Se cerrará el círculo iniciado al propio comienzo de la cinta, una imagen que nos recuerda el origen primitivo de todo lo extraño, original y esencial que posee la existencia.
Aunque los hombres persistan en su error de destruir; al final la paz, la belleza, la felicidad, la pureza, siempre continuarán existiendo.
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