Es curioso que justo en este momento pienses que hay cosas realmente bellas en la vida. Por ejemplo: Cuando eras niño salir al parque, andar en bicicleta, jugar a las "luchitas" y patear a otro niño cuando estaba en el suelo. Todo eso te daba un alto grado de felicidad y satisfacción, pero ahora que estás en los inicios de ser un verdadero adulto, te das cuenta, que las cosas bellas de la vida son muy pocas y una de ellas: "El Amor", todavía no ha tocado a tu puerta.
Todas tus antiguas relaciones se basaban en pláticas estúpidas(en persona y por teléfono), peleas por cualquier estupidez, celos sin sentido y desgaste físico y emocional a lo bruto(por no decirlo peor). Ahora lo que buscas es algo que realmente te haga sentir, una persona a la cual admires y respetes y que sienta lo mismo por ti, alguien con quien puedas pasar el tiempo y sentir que solo han pasado unos segundos, alguien realmente único y especial.
Así que hoy miras al cielo y pides que pronto llegue esa relación, que todos los astros te den un poco de suerte para que tu búsqueda llegue a su fin lo antes posible.
¿Qué haces cuando la persona con la que estás te hace sentir bien?, cuando por un momento te olvidas de todo y el tiempo pasa a gran velocidad, cuando no te interesa nada de lo que ocurre a tu alrededor, cuando solo te concentras en su respiración, en su aroma. Cuando tratas de calentar sus manos frías y rozar sus labios, cuando te pierdes en sus ojos.
Tus ideas chocan, tus planes se alejan de ti, tu forma de actuar cambia, te sientes bien y sonríes, sus brazos son tan confortantes que quisieras quedarte para siempre. Pierdes la razón por un momento, te estremeces y la haces estremecer con caricias y besos, juegas, el deseo llega y así mismo se va. La noche fría llega, tiemblas, tratas de descansar para poder volver a sentir su compañía, piensas en ello y te tranquilizas esperando que mañana por fin puedas actuar de la forma que algunos esperan de ti.
Sólo esperas hacer lo correcto, lastimar a alguien es lo último que quieres.
Es curioso que justo en este momento te sientas como un niño, te sientas ilusionado, interesado en el interés que tu forma de ser y personalidad despierta a una persona con las características más especiales que pudieras haber conocido.
Desde hace muchos meses despiertas pensando en ella, comes pensando en ella, tus actividades se detienen justo cuando te preguntas que estará haciendo en esos momentos, sonríes.
Cierras los ojos y ves los suyos, juntas los labios y sientes un pequeño roce que te gustaría que fuera provocado por sus labios, te tomas las manos pensando en las suyas, todo es como un sueño que no quieres que termine.
No sabes que pasó, ella te ganó, te conquistó con sus gestos, su mirada tierna, su forma de morder sus labios y los tuyos, sus manos con dedos largos, su cabello hermoso, sus hombros que te invitan a besarlos, su piel suave, su dulce aroma... miras la luna y esperas que ella también lo haga, respiras profundo y cierras los ojos.
Y pensar que estuviste muchas renunciando a todo esto por tus inseguridades, por ciego, por no querer ver lo que tenías enfrente, te sientes un poco culpable por haberla lastimado en todo este tiempo, no obstante tomas valor y juras jamás volver a hacerlo, al contrario, tratarás por todos los medios hacerla sonreir todos los días, harías todo por conservar su luz.
La "inmadurez" no se ha ido del todo, parecen adolescentes, con brillo en los ojos, con chistes tontos, risas por cualquier cosa, llamadas largas por teléfono, ganas inmensas de verse uno al otro, te complementa y la complementas, es tu equilibrio, vuelves a sonreir porque a pesar de todo, cayendo en contradicciones, es una relación estable, comprometida por ambos lados, muy madura.
Rara vez el tiempo pasa tan rápido, su compañía es muy amena, lo suficiente y lo máximo que puede ser, las demás cosas poco importan; te concentras en hacerla sentir intensamente, ella hace lo mismo, juntos vuelan y se hacen uno.
Piensas que el miedo se ha ido, a ti no te interesa lo que opinen los demás y a ella tal vez sí, sus vidas brillan y se deslumbran una a la otra, lo que tienen hasta ahora es puro, te emocionas y continuas sonriendo. Se tienen el uno al otro.
Eres lo que yo buscaba, yo soy lo que buscabas, ¿QUÉ MAS PODEMOS PEDIR?
Cuando estamos juntos todo sale bien, nos va bien, nada ni nadie puede arruinar el momento, te veo solo porque eres tú y yo no voy a ninguna parte. Mientras esté cerca, nada malo te va a pasar, nada mientras la luz que de nosotros emana siga brillando, nada mientras estés en mi pensamiento y mientras lo nuestro siga su curso natural, mientras nos tengamos uno al otro.
Recuerda que te sigo admirando y amando cada vez más.
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