Director: Hal Ashby
Duración: 109 minutos
País: Estados Unidos
Elenco: Warren Beatty, Julie Christie, Goldie Hawn, Lee Grant, Jack Warden, Tony Bill, George Furth, Jay Robinson, Ann Weldon, Luana Anders, Randy Scheer, Susanna Moore, Carrie Fisher, Mike Olton, Richard E. Kalk, entre otros.
" La historia de dos mujeres y sus dificultades que están relacionadas con un peluquero de Beverly Hills las cuales ocurren en 1968, en la víspera de la elección presidencial de aquel año."
Lamentablemente olvidado este desgarrador retrato de la contracultura y del, definitivamente desterrado por inalcanzable (en los Estados Unidos después de la guerra de finales de los sesenta e inicios de los setenta) denominado Sueño Americano. Esta película comenzó siendo un proyecto independiente del que desde un inicio fue el productor y promotor de la misma el actor Warren Beatty, que además fue co-guionista junto con Robert Towne, el gran escritor de la obra maestra Chinatown, por lo cual parece más que lógico pensar que la aportación de Beatty se limitaría a una serie de sugerencias al trabajo de Towne.
La dirección recayó en Hal Ashby, gran amigo de Jack Nicholson tras el rodaje de The Last Detail y que influyó en Beatty para que le hiciera el encargo, pese a sus propias reticencias iniciales y a la oposición de Towne. De carácter violento y naturalmente contestatario, además de ser víctima de numerosas adicciones, Ashby infundió al proyecto la suficiente dosis de amargura para que la cinta se haya convertido, junto con otros filmes como Network o Coming Home, en verdadera crónica generacional de aquella época.
El relato de la obra dirigida por Ashby gira alrededor del personaje de George, hábil peluquero de Los Ángeles, un perdedor que aspira a establecerse por su cuenta con su propio negocio, por la que por supuesto habrán de pasar las damas más atractivas de la ciudad para ponerse en sus manos, incapaces de no sucumbir a sus encantos. Así que, el destacado reparto femenino de la cinta es el siguiente: primero su novia Jill, interpretada por Goldie Hawn, su ex Jackie a quien da vida Julie Christie, después la veterana Lee Grant se brinda en el papel de su amante Felicia y finalmente una jovencita Carrie Fisher realiza el papel de la hija Lorna. La vida de todas ella gira alrededor del impávido peluquero y del magnate protagonizado por un cínico Jack Warden, esposo de Felicia y amante de Jackie.
El director, en tono tragicómico, alterna chistes divertidos con un profundo pesimismo, en donde las relaciones humanas se ven claramente afectadas por una crisis global, que no es sólo económica y/o de identidad, sino de valores, de confianza y de motivación, de tal manera que concluye retratando a los personajes con escasa esperanza y sin futuro.
Soberbia aquella escena que podría calificarse como central de la obra y también su punto más alto, ya que sirve como el eje desencadenante del derrumbe de George. Claro, no puede ser otra que aquella que ocurre en una especie de cena con recepción del senador republicano y posterior fiesta lisérgica y por lo tanto psicodélica, donde aparece música de la época y donde la traición del incontenible George, en el mismo acto a su novia y a su benefactor acostándose con su ex, desemboca en un trágico final para sus aventuras. De hecho, sucede que en algún momento George se desnuda (en forma metafórica) ante su propia novia contándole su vacío moral, su falta de escrúpulos y su ausencia de ambición (incluso, le cuenta que estudio peluquería por la abundancia de chicas) y pierde con Lester cualquier oportunidad de financiación para su brillante negocio.
Brillante también el paralelismo que realiza el escritor en su guión acerca de la habilidad de George a la hora de peinar a las mujeres y al momento de practicar el sexo con ellas, como en el caso de Lorna cuando ella le confiesa que nunca la han peinado, a lo que George, presto y diligente, corre a poner remedio a tan triste problema, demostrando su total falta de conciencia. Pero no es que George sea un desalmado, más bien parece ser una víctima de las circunstancias, puesto que su única razón de ser y la única fuente de alimentación para su autoestima, parece ser su incuestionable éxito sexual.
En fin, sé que está clasificada como una comedia, pero me queda claro que hay momentos genuinos de humor en esta cinta, y sin embargo me pareció sumamente conmovedora. Después de verla me quedé con una sensación de nostalgia, la pérdida y la sensación de nostalgia por el pasado. Una sensación de que tal vez el tiempo pasado fue mejor de lo que se está viviendo en la actualidad y una especie de apremio por tratar de volver a crear algo de esa magia que existía cuando era más joven. Reconocer finalmente lo que es realmente importante cuando ya es demasiado tarde, es una de las tragedias que afectan a la mayoría de los humanos.
Y dejando de lado que George sea un libertino, el relato puede verse desde otras perspectivas. Por ejemplo, es muy cierto que es un mujeriego, pero siento que también podría verse como un objeto utilizado por sus propios trofeos. Y es que de alguna manera las mujeres en esta cinta podrían verse como las agresivas en cada una de las escenas sexuales que ocurren. Las demandas constantes de todas las mujeres en esta película, incluso las que se llega a encontrar en la calle y le exigen que las llame, provocan en algún sentido que el personaje de George merezca un poco de simpatía.
En general, me parece que la película está muy infravalorada, debe ser porque simplemente se le percibe como una comedia sexual con algún toque de farsa. Y la verdad es que hay aspectos más profundos en ella que eso. Para conseguir apreciarla realmente, debe ser puesta en el contexto de la época en la que fue concebida, el fin de una era (los impetuosos sesenta) y el comienzo de otra, caracterizada más por la pérdida de la inocencia. Seguramente, así se puede comprender mejor el dejar atrás una etapa de la vida y pasar a tiempos nuevos que pueden ser simplemente no tan cómodos y felices para los que disfrutaron plenamente lo que ocurrió antes.
Una película que sorprende por su madurez y su refrescante inteligencia.
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