El pasado sábado cambiándole aquí y allá a la "caja idiota", en la inercia reclusiva en casa, me detuve un rato en el canal principal de la empresa de las franjas de colores y de repente ví una noticia que me impactó: Rocío Dúrcal había fallecido. Y digo "me impactó" por nombrarlo de alguna forma, por no decirlo muy acartonadamente, muy seriamente, ya que no es una artista que me haya influído directamente. Más bien, me trae buenos recuerdos y no me imaginaba que como un síntoma del 'Complejo de Edipo' me enamoraría de algunas de sus canciones gracias a mi madre.
Falleció como víctima de cáncer en la matriz que se le diagnosticó desde octubre de 2001, mientras se encontraba en su residencia de Torrelodones en Madrid. Tenía 61 años.
Un poco sobre ella:
Su nombre real era María de los Ángeles de las Heras Ortiz y nació en 1944 un 4 de octubre en Madrid.
Cantaba flamenco desde niña haciéndose llamar Rocío Benamejí y luego Rocío Fiestas.
Tras quedar finalista en un concurso de televisión, atrajo la atención de productores cinematográficos que la convirtieron en uno de los rostros más populares de la década de los 60 y 70, con un total de 15 películas. Las más importantes "Canción de juventud"(1962) y "Rocío de la Mancha"(1963), "La chica del trébol" y "Sólo tengo 17 años" en 1964, "Más bonita que ninguna" (1965) "acompáñame", "Buenos días, condesita"(1966), "Amor en el aire"(1967) y "Las leandras"(1969), este último su trabajo más taquillero.
A finales de los 70 dio un giro en su carrera musical como intérprete de canciones rancheras mexicanas.
Inmortalizó la balada "Amor eterno", tema que a la postre le valió para ser conocida como "la mexicana más española".
Hablar de Rocío Dúrcal es hablar del "Divo de Juárez" con quien hizo mancuerna en una decena de grabaciones. Una amistad que él (O ¿es ella?) ha descrito como "un amor es eterno, pero una amiga como tú, es para siempre".
Y bueno... a mi no se me van a olvidar las famosas canciones que mi madre ponía cuando yo era pequeño, mientras limpiaba la casa y cantaba a pleno pulmón la letra de "Costumbres", "Fue un placer conocerte", "Como tu mujer", "La guirnalda", "La gata bajo la lluvia" o la ya antes mencionada "Amor eterno" que casi automáticamente se convirtió por aquellos tiempos en la canción que más me recuerda a mi progenitora. No me da vergûenza decirlo.
En otros temas, los últimos días las noticias se han llenado de sensacionalismos regiomontanos y uno como zombie siente algo atrayente por los "casos escandolosos, se ha hecho una enorme cobertura del "Asesino de cumbres" un humano como todos nosotros, con virtudes y defectos(estos últimos me parece que lo condujeron a hacer lo que hizo) al que las empresas televisivas y demás medios han satanizado sobremanera. Nada de extrañar, vivimos en México y necesitamos nuestra "dosis diaria" de amarillismo (propio de la fina revista Alarma) cuando se habló del foro mundial del agua y aquí vamos de nuevo: la manera sensacionalista en la cual se mostraban las manifestaciones globalifóbicas. Deberían actuar de una manera más responsable y no lo hacen, ni modo. Nos merecemos esa clase de televisión.
Y volviendo a AMLO o Peje (para los cuates) cito textualmente a René Avilés Fabila en una de sus columnas sobre el caudillismo(para quien no sepa que significa este término, investíguelo) de este personaje: "Es un hombre muy limitado, lo sabe y por eso no debate, sus estudios fueron insuficientes y particularmente mediocres. Reprobó materias y no pudo con la tesis durante años y años, no habla idiomas y de hecho no ha salido del país.
A cambio, como Bruce Willis, apareció en el lugar adecuado y a la hora oportuna. Siguiendo con citas sobre cine, carece de planes y proyectos serios, responsables, va, como Indiana Jones, improvisando y lo hace mejor porque apela al lenguaje popular, que es el suyo, hace chistes pésimos que le festejan hasta los intelectuales más destacados del país. Los medios lo han hecho un ídolo. Las exageraciones han llegado al extremo de comparar al nuevo caudillo con Jesucristo (como él mismo se ve), con un mesías y con el terrenal Benito Juárez..."
Pues si, señores mexicanos, habrá que "aguantar" a un verdadero ignorante durante 6 años, con la banda presidencial, sentado en la silla y tomando las riendas de nuestro "hermoso país". Ya nos chingamos.
En cuanto a la serie de números que aparecen entre paréntesis después del título, hace referencia al antiguo número de "Lala bonita". Es un número que probablemente nunca olvidaré(memoria privilegiada la mía) y que siempre me traerá buenos recuerdos. Ahora estoy tratando de memorizar el nuevo número, lo que creo estar cerca de conseguir. No sé, cuantas veces lo marqué para decir muchas tonterias o reclamar, para cortar lo que teníamos sin saber en lo que se convertiría, tantas palabras, tantos mensajes de texto, tantas conversaciones interminables en las madrugadas abriendo nuestros corazones. Muchos recuerdos y por ello le dedico este espacio, al final de cuentas hay cosas que nunca se olvidan.
Comentarios