Su excesiva duración(2 horas con 45 minutos) imposibilita que el interés se mantenga constante. Gran parte de la cinta se centra en las andanzas de los investigadores y no tanto en el perfil psicológico del asesino que para mi gusto le hubiera dado un giro totalmente diferente a la historia. Es cansado observar como policias, periodistas y hasta caricaturistas destruyen sus respectivas carreras (y vidas) por su obsesión hacia el caso en tantos minutos para mi punto de vista desperdiciados. No me gustó Jake Gyllenhaal de protagonista. Me sorprendió Mark Ruffalo como el policía encargado del caso y me dejaron un buen sabor de boca el drogadicto de Robert Downey Jr. que está genial como el periodista "especializado" y Brian Cox. Me entusiasmó ver la referencia obligada hacia Dirty Harry ya que es uno de mis filmes favoritos, que como sabemos está basada en la historia del Zodiaco.
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