Existen varias formas de demostrar que eres competitivo, la mejor de ellas es mostrando con hechos de lo que eres capaz de hacer, pero también muy importante es lo que se conoce como el potencial de una persona.
La capacidad que tiene una persona para desarrollar, crecer, crear, se convierte en su potencial, pero ¿verdaderamente es fácil determinar si una persona es competitiva?
La única forma de saber si una persona es competitiva para algo es conociendo sus resultados anteriores, los cuales nos dirán cuando una persona ha sabido desarrollarse adecuadamente en tal o cual ámbito, bajo tal o cual situación o circunstancia y el resultado de esos eventos son los que nos enmarcan en buena medida si tenemos o no potencial para algo.
Uno de los principales factores que nos limitan a las personas a descubrir nuestro verdadero potencial para llevar a cabo las cosas es que las limitaciones a todo son impuestas en la mayoría de los casos por nosotros mismos.
Para poder crecer y superarse es necesario tomar riesgos, aunque en ocasiones estos riesgos no pueden ser evaluados en su dimensión adecuada, debemos considerar la siguiente premisa que se aplica fácilmente en estos casos; “El que no arriesga no gana”
Considerando el “arriesgar” como una actitud luchadora y activa en la que los mayores impedimentos son aquellos que nosotros mismos creamos en nuestra mente y que nos frenan para la realización de nuestros objetivos.
La medida de tu potencial está únicamente dentro de ti.
No existe persona o institución capaz de determinar tu verdadero potencial para alcanzar tus logros más complejos, tus metas más difíciles, tus objetivos más retadores, eres tú y simplemente tú quien decide hasta dónde quiere llegar, solamente tú conoces tu verdadero potencial y tienes la capacidad de sacarlo a la luz, demostrar a los demás de lo que eres capaz.
Pero más importante que demostrar tu potencial a los demás, debes demostrártelo a ti mismo.
Una vez convencido de esto, no tendrás límites para tu desarrollo, no habrá barreras para iniciar tu camino a la superación de manera constante, sostenida y sobre todo conciente de tu capacidad y potencial para hacer todo, absolutamente todo lo que te propongas.
La capacidad que tiene una persona para desarrollar, crecer, crear, se convierte en su potencial, pero ¿verdaderamente es fácil determinar si una persona es competitiva?
La única forma de saber si una persona es competitiva para algo es conociendo sus resultados anteriores, los cuales nos dirán cuando una persona ha sabido desarrollarse adecuadamente en tal o cual ámbito, bajo tal o cual situación o circunstancia y el resultado de esos eventos son los que nos enmarcan en buena medida si tenemos o no potencial para algo.
Uno de los principales factores que nos limitan a las personas a descubrir nuestro verdadero potencial para llevar a cabo las cosas es que las limitaciones a todo son impuestas en la mayoría de los casos por nosotros mismos.
Para poder crecer y superarse es necesario tomar riesgos, aunque en ocasiones estos riesgos no pueden ser evaluados en su dimensión adecuada, debemos considerar la siguiente premisa que se aplica fácilmente en estos casos; “El que no arriesga no gana”
Considerando el “arriesgar” como una actitud luchadora y activa en la que los mayores impedimentos son aquellos que nosotros mismos creamos en nuestra mente y que nos frenan para la realización de nuestros objetivos.
La medida de tu potencial está únicamente dentro de ti.
No existe persona o institución capaz de determinar tu verdadero potencial para alcanzar tus logros más complejos, tus metas más difíciles, tus objetivos más retadores, eres tú y simplemente tú quien decide hasta dónde quiere llegar, solamente tú conoces tu verdadero potencial y tienes la capacidad de sacarlo a la luz, demostrar a los demás de lo que eres capaz.
Pero más importante que demostrar tu potencial a los demás, debes demostrártelo a ti mismo.
Una vez convencido de esto, no tendrás límites para tu desarrollo, no habrá barreras para iniciar tu camino a la superación de manera constante, sostenida y sobre todo conciente de tu capacidad y potencial para hacer todo, absolutamente todo lo que te propongas.
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