Dale con lo mismo

¿Por qué tienes un blog?

1. A veces tienes tardes aburridas y que mejor que aprovecharlas escribiendo de tu vida para que otros te conozcan y a lo mejor encuentres pareja,
2. Quieres que el mundo reconozca tu talento como escritor, fotógrafo, artista plástico, músico... o cualquier otra cosa.
3. Sabes que en estos tiempos, este es el primer escalón ascendente a la fama.
4. Buscas alguien que comparta tu opinión o un pequeño círculo de fanáticos de videojuegos, música, cine, literatura, etc.

Creo que esas pueden ser algunas de las razones más fuertes, y digo 'creo' porque no estoy seguro de que sean todas. Y es que, mi razón para tener un blog era simplemente expresarme (algo que no suelo hacer fácilmente) lo cual no he conseguido estos últimos días.

Estoy en cierta forma preocupado, ya que no he conseguido la inspiración tan anhelada, lo que se ha visto reflejado en las pocas entradas que he tenido. Quisiera hablar de tantas cosas, sin embargo no encuentro las palabras, cuando quiero pensar simplemente me bloqueo.

Este va a ser uno de mis posts más aburridos ¿y qué?... no tengo nada de que hablar y a la vez sí, definitivamente le he perdido interés a este medio. Al principio no estaba seguro sobre que escribiría, pensaba que mi vida era bastante aburrida como para tener algo que contar.

Entonces, me enamoré como loco, y dediqué muchas noches a tratar de describir emociones que con su encanto me producía, emociones que yo pienso nunca antes había experimentado a tal intensidad. Mi creatividad alcanzó límites insospechados, logrando plasmar hermosos poemas (que me plagiaba) cuentos y frases, todos dedicados a ella, a veces los creaba por noches enteras, como una forma de demostrarle lo que estaba sintiendo. Era la primera vez que a alguien le daba tanto de mi. Sabiendo cuánto la quería, y que desde el momento en que me dí cuenta de "todo", que desde el primer momento le entregaba mi vida, la tomó sin pensarlo.

Fue bastante cómodo para mi tener alguien que estuviera dispuesta a mis mínimos caprichos, ¿a quién le dan pan que llore?... y por supuesto, diseñé una verdadera estrategia para retenerla a mi lado. Por supuesto, le dije que la quería, se lo dije tantas veces y ella lo escuchó tantas veces que sigo sorprendido. ¿Realmente siento lo que digo sentir?

Y así fue como yo, el que supuestamente no creía en el amor, me encontré pensando más en mi que en ella misma. Me encapriché de forma desmedida, llegando a dejar atrás cosas que antes disfrutaba. No me alejé de mis amigos, porque esos en mí se cuentan con "los dedos de las manos" pero si perdí horas de estudio o diversión o tal vez no las perdí, sólo las invertí de manera errónea. Las perdí por escribirle algo bonito o hablar con ella.

A veces pienso que la convertí en otra persona, se volvió una mujer chiquitita y manipulable, que con tal de llenar mis tontas expectativas. Comenzó a permitirme cosas que nunca antes imaginó, permitió que me volviera su dueño, y sin el menor recelo, se volvió una autómata obediente de mis decisiones, se volvió literalmente una estúpida que no era capaz de pronunciar la palabra NO.

Se olvidó de lo linda y agradable que puede llegar a ser, reprochándose constantemente su apariencia, su carácter que cataloga de "aburrido" y su poca capacidad para atraer a alguien.

Hoy puedo decir con ABSOLUTA seguridad que estoy muy lastimado, me duele en el alma todo lo malo que he hecho que experimentes a mi lado y todo lo que no hemos logrado que ambos deseamos con toda el alma, no sé si esto se va a terminar... yo sólo sé que quiero ser el de antes, tener más energía, tan capaz, tan seguro de mi mismo como siempre fui.

Estoy convencido de que no faltará alguien que tenga deseos de conocerme y estar conmigo, pero creo que sería muy difícil comenzar algo otra vez, quiero tener contigo una relación madura y placentera, y sobre todo, una relación donde exista respeto hacia mi persona. Ese respeto tu también te lo mereces, el respeto por ti misma y la dignidad que tienes primero como persona y después como mujer.

Me sigo sorprendiendo de lo que siento por ti, es tan fuerte y no se daña con nada. A pesar de esa condición que tiene este sentimiento de invencible, no creo que realmente lo sea. Todos tenemos un límite, el cual puede ser cruzado en cualquier momento.

Sólo espero que esta tristeza se convierta en tranquilidad, y que con el tiempo logre sanar todas las heridas. Debemos resolver nuestros conflictos, porque la ausencia de ellos no significa armonía.