Recién llegado del cine, vengo a este sitio que ahora percibo mucho más mío que suyo, aunque no por eso sus aportaciones, las retroalimentaciones de ustedes que me leen, pierden su valor.
De tal manera, que no se les puede impedir que lo sigan haciendo, incluso a quienes con un tono irónico y hasta vulgar, dejan sus comentarios en mi blog. Yo no lo juzgo, para mi es válido a pesar de que les pongo esos adjetivos.
Pero bueno, me encuentro aquí no para determinar cuán 'buenos' o cuan 'malos' puede llegar a ser los comentarios que me dejan, sino para dar mi opinión sobre la esperadísima tercera película del joven realizador Darren Aronofsky nombrada en su título original The Fountain y en nuestro idioma La Fuente de la Vida.
Primero, tengo que ser muy honesto: no sé por donde empezar. Creo que tengo que ordenar detalladamente mis ideas.
Lo primero que me llamó la atención, en una especie de homenaje a las "viejas chismosas" que nunca faltan, es que acabo de enterarme que Aronosfky y Rachel Weisz (la protagonista de la cinta) son pareja y que además el mencionó que "disfrutó mucho filmar las escenas de sexo" entre Weisz y Hugh Jackman, el otro protagonista de la cinta; a lo que yo le veo tintes de perversión, pero ese es otro tema. Sigo desviándome del objetivo, les prometo que de ahora en adelante si lo voy a lograr.
Pienso que la enorme y hasta cierto punto desmedida expectativa por ver esta nueva cinta del novel director, se generó a partir de sus anteriores trabajos muy renombrados,conocidos, que la mayoría de los cinéfilos hemos visto: Pi y Réquiem por un Sueño.
Su nueva cinta, por ejemplo fue recibida con silbidos y abucheos por el público presente en el Festival de Venecia, lo que en el papel no parecía ser un buen antecedente para el público ávido, que como yo deseábamos observarla. Sin embargo, yo puedo decir que a mi me importan poco los críticos, ya que constantemente ellos ven una cosa, y uno como espectador ve otra diferente. Creo que las razones de sus opiniones sobre ciertas películas están influídas por varias circunstancias, de diversas índoles como económicas, políticas y de compadrazgo. Así que ¡a la chingada los críticos!
Además también le pasó a Sofia Coppola con su nueva película en Cannes, y eso no es un parámetro para no ir a verla, sólo porque "los que más saben" las maltrataron.
En fin, La Fuente de la Vida es una historia de ciencia ficción, que en mi particular punto de vista puede llegar incluso a ser una historia de amor, no desarrollada convencionalmente, que gira en torno a dos temas que siempre cuando se tocan parecen estar en contrasentido: la vida y la muerte. Yo recuerdo que cuando se dió su estreno, (la semana pasada si no me equivoco) en una estación de radio local (muy pretensiosa) usaban una especie de frase para promocionarle que versaba más o menos así: ¿Qué harías si tuvieras vida eterna?, pregunta que me puso a reflexionar bastante en aquel momento.
Ahora que ya he visto el filme, puedo expresar abiertamente mi respuesta a tal interrogante: Yo no quiero vida eterna. En cierta forma, eso percibí yo de la cinta, Aronofsky trata de manifestar que hay que aceptar la muerte como parte de la vida (esto no es Tanatología), quizá mucha gente no lo entiende así y como me pasó hace un par de horas en la sala del cine, hasta comentarios descabellados como los que hicieron los críticos de Venecia, no se hicieron esperar; tales como "Pinche película drogada"o "no le entendí ni madres". Por lo cual, yo siempre he dicho que lo que no es líneal, plano, sin aristas y escapa a su limitado raciocinio, genera que aparezcan otro tipo de procesos de atribución que también de igual forma intentan explicar todo de una sola forma, de una única y exclusiva manera, la lógica. En pocas palabras, lo que no es lógico(según ellos) está extraño, es de alguien que estaba drogado cuando lo hizo.
Por eso, yo no doy consejos. Si la ignorancia es temeraria, que siga así, si leyeran un poco más y vieran más cine sus procesos mentales se acelerarían, pero no, prefieren ver Niñas Mal a ver este clase de obras "raras".
Ya no me voy a enfadar por eso que a mi ni me compete, yo sólo digo que a mi me gustó, movió fibras internas y en unas cuantas ocasiones estuvo a punto de llorar. Eso es lo más importante para mí del arte. Pero eso, eso solo es mi visión subjetiva de las cosas.
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