Todos estos días que han scuedido desde el lunes, que fue el último día que te ví, han sido muy difíciles para mi. Tal vez en cierta forma los días de asueto empezaron a complicar esta situación, ya que cuando me encontraba ocupado no pensaba en algunas cosas como lo hago ahora; estar con la mente puesta en algo me ayudaba y cuando no era así por lo menos fingía estar bien. Pero es cansado, duele mucho más actuar que enfrentar los problemas. No voy a decir que no me duele que te hayas ido; sin embargo te has ido tantas veces que cada vez que sucede, me duele menos. No voy a dedicarte nada en especial, ni a decirte "hasta nunca" u "ojalá que no regreses" porque en la vida nunca hay nada definitivo y que mejor prueba que lo que nosotros hemos vivido. Tengo ganas de llorar, sacar un poco de la frustración que llevo dentro y sin embargo no puedo.
Espero poder lograrlo. No le puedo contar a alguien cercano como me siento, me parece que jamás lo entenderían. Por lo pronto la vida sigue, hay que continuar y abrir los ojos. Mañana será un nuevo día, habrá que iniciar de nuevo como fue, es y será.
Quisiera volver a sentir la emoción de sentirme adorado y adorar. Lo añoro bastante. Hay una cosa que ha sido particularmente extraña: algunas situaciones o personas se han cruzado en mi camino con experiencias similares a la mía, eso en una forma indirecta me ha ayudado bastante. Pasar del insight descriptivo al ostentivo (dírian en psicoterapia psicoanalítica) no es tarea fácil. Pero voy bien.
Ya da flojera decir que este blog está un poco abandonado, la verdad es que me vale madre. Tengo muchas cosas que decir, historias que contar y secretos que develar o hasta disfrazar de mentiras; sin embargo por el momento eso tendrá que esperar. Hay otras cosas más trascendentales que merecen toda mi atención. Cuando eso termine, volveré a las letras de este lugar.
¿Algo más? Yo me pregunto y me respondo solo: No, por el momento es todo, como en taquería o en restaurante mamón. Yo me entiendo solo, gracias.
Espero poder lograrlo. No le puedo contar a alguien cercano como me siento, me parece que jamás lo entenderían. Por lo pronto la vida sigue, hay que continuar y abrir los ojos. Mañana será un nuevo día, habrá que iniciar de nuevo como fue, es y será.
Quisiera volver a sentir la emoción de sentirme adorado y adorar. Lo añoro bastante. Hay una cosa que ha sido particularmente extraña: algunas situaciones o personas se han cruzado en mi camino con experiencias similares a la mía, eso en una forma indirecta me ha ayudado bastante. Pasar del insight descriptivo al ostentivo (dírian en psicoterapia psicoanalítica) no es tarea fácil. Pero voy bien.
Ya da flojera decir que este blog está un poco abandonado, la verdad es que me vale madre. Tengo muchas cosas que decir, historias que contar y secretos que develar o hasta disfrazar de mentiras; sin embargo por el momento eso tendrá que esperar. Hay otras cosas más trascendentales que merecen toda mi atención. Cuando eso termine, volveré a las letras de este lugar.
¿Algo más? Yo me pregunto y me respondo solo: No, por el momento es todo, como en taquería o en restaurante mamón. Yo me entiendo solo, gracias.
Comentarios