Mi corazón se reventó en tus manos
quedaste llena de sangre y yo...
muerto en vida.
Mis ojos quedaron ciegos de fe,
me diste de beber tus lágrimas...
agonizaron mis ojos
un poco más de tiempo.
Mi boca quedó abarrotada de besos rotos
tu boca guardó el luto.
Volé hacia la oscuridad,
la luz de mi pasado ya no era luz
sólo era la sombra de un recuerdo fructuoso.
Quise volver,
retomar la esperanza,
más mis pies estaban ensangrentados de errores
y de caminos mal tomados por encontrar el rumbo.
Me diste la vida
pagué con la muerte,
nos dimos el alma
ahora lloran dos cuerpos inertes.
Sólo fuimos dos apasionadas ilusiones,
buscando en la inmensidad de la noche
un simple suburbio llamado Amor.
Yo ya he muerto antes
y te sigo queriendo
dime cuando morirás...
dime cuando
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