Director: Brian De Palma
Duración: 170 minutos
País: Estados Unidos
Reparto: Al Pacino, Steven Bauer, Michelle Pfeiffer, Mary Elizabeth Mastrantonio, Robert Loggia, Miriam Colon, F. Murray Abraham, Paul Shenar, Harris Yulin, Ángel Salazar, Arnaldo Santana, Pepe Serna, Michael P. Moran, Al Israel, Dennis Holahan, entre otros.
" Un emigrante cubano frío y sanguinario, Tony Montana, llega de Cuba para instalarse en Miami, donde se propone hacerse con un nombre dentro del crimen organizado de Florida. Junto a su amigo, Manny Rivera, inicia una fulgurante carrera delictiva con el objetivo de ascender a la cúpula de una organización de narcos."
A diferencia de los gangsters que ascienden y caen en las películas de Coppola o Scorsese, que tienen su cuota alta de glamour y elegancia y saben estar serios, poniendo la cara de "estoy predestinado para ser alguien importante", los rufianes que ascienden y caen en esta cinta son míseros y no dejarán de serlo aunque lleguen a estar repletos de dinero. Pero ahí reside gran parte del encanto de esta creación, en esas imágenes de nuevos ricos viendo la televisión en un jacuzzi inmenso, aspirando coca y discutiendo por tonterías.
Porque esto no es Nueva York, no es Chicago, ni siquiera es Nueva Jersey, esto es Miami y lo más parecido a la finura que conocen en ese lugar es a Julio Iglesias.
El guión es del también director Oliver Stone, quien mientras lo escribía estaba atravesando justamente por una adicción a la cocaína.
No puedo ser objetivo con esta realización, porque me gusta demasiado, es uno de esos proyectos cinematográficos por los que siento una auténtica devoción.
Media película vale la pena en gran medida por la interpretación de Al Pacino. Por eso recomiendo ampliamente apreciarla en su versión original. Esta sensacional, perfecto. Muchos lo acusan de sobreactuado, de histriónico, pero realmente esa es la actuación que requería el personaje; su acento cubano es increíble. Si alguien ve el filme doblado, no tiene perdón. El doblaje no le hace justicia a la intervención de Pacino dentro de la obra.
Es un verdadero agasajo verlo hablando inglés con acento cubano, usando continuamente términos de la jerga de los latinos afincados en Miami.
Por otro lado Michelle Pfeiffer es algo más que la clásica "chica florero" que aparecen en este género, esta estupenda en su primer gran papel, aparte de lucir radiante. Steven Bauer quien da vida a Manny, el amigo de Tony está espléndido, a pesar de no ser en su momento un actor muy reconocido. F. Murray Abraham protagoniza una de las escenas más célebres, y en el poco tiempo que aparece en pantalla cumple bastante bien, al igual que Robert Loggia. De igual manera habría que destacar a la atractiva Mary Elizabeth Mastrantonio quien se ocupa de ser Elvira, la hermana de Tony, quien tiene sobre ella un deseo casi incestuoso.
La tarea de la cinta es narrarnos una gran historia sobre la ambición. Tony va superando todas las barreras para conseguir lo que quiere, y no le importa el método que deba usar para alcanzar sus metas. El asesinato, la amenaza o el chantaje serán algunas de sus armas. Al fin y al cabo, conseguir todo lo que anhela le acabará trastornando. Su posición de poder le hará perder la cabeza. Terminará convertido en un grandísimo paranoide consumido por la cocaína.
El guión está muy bien estructurado. Vamos viendo la progresión de Tony desde lo más bajo hasta lo más alto, es justo allí donde se le van las cosas de las manos y no es capaz de controlarlo.
En cierto modo parece que todo este ejercicio de narración está creado para conducirnos hacia el inevitable final.
La dirección de Brian De Palma se recrea en la violencia, como si disfrutara viendo sangre por todos lados. Mueve en exceso la cámara, quizás en herencia de su conocido gusto por Don Alfred (Hitchcock).
La estética ochentera es altamente sugestiva, y nos permite zambullirnos en la época con total facilidad. A ello contribuye una encantadora banda sonora de Moroder que nos introduce en las salas de baile completamente.
A pesar del poco reconocimiento que tuvo la película en aquellos días de su lanzamiento, con el paso del tiempo se ha ido convirtiendo en una obra de culto, con uno de los finales más impactantes de la historia del cine.
Recuerda: "el mundo es tuyo".
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