
Director: Alfonso Cuarón
Duración: 109 minutos
País: Japón/Reino Unido/Estados Unidos
Reparto: Clive Owen, Michael Caine, Charlie Hunnam, Chiwetel Ejiofor, Julianne Moore, Danny Huston, Pam Ferris, Clare-Hope Ashitey, Peter Mullan, Oana Pellea, entre otros.
" Año 2027: el ser humano afronta su posible extinción. La humanidad ha perdido la capacidad de procrear, y el mundo se estremece ante la noticia de la muerte de la persona más joven de la Tierra, que tenía 18 años. Cuando el caos irrumpe, Theo, un desilusionado ex-activista radical convertido a burócrata, es confrontado por Julian para ser el protector de la persona más buscada sobre la faz de la Tierra."
No son muchas las obras cinematográficas que, situadas temporalmente en el futuro, hayan abordado este desde una perspectiva seria y más o menos realista. A la estrecha lista se suma ahora esta película de Cuarón.
En este caso la sociedad futura que se nos plantea es irreversiblemente caótica, con un mundo que está a punto de desaparecer y con la infertilidad generalizada postulándose como el final para la raza humana.
Es en ese mundo en el que un hombre sin fe se ve envuelto en una situación según la cual él se convierte en la única esperanza para la salvación de la especie. El hecho de que el personaje protagonista esté cargado de dudas y haya perdido toda esperanza contribuye a una inmediata identificación por parte del espectador. Si además a ello le sumamos que a este personaje le da vida el infalible Clive Owen, sus andanzas provocan en algunos momentos una angustia que pocas veces he vivido al presenciar un filme.
La cinta cuenta con un ritmo constante y una cámara inquieta y nerviosa, reflejando de esta forma a la perfección el mundo que describe. Contribuyen a la brillantez general de la producción los estupendos secundarios con nada menos que Michael Caine, muy alejado de lo que suele hacer, la brillante banda sonora (tanto la música escrita para la ocasión como las canciones seleccionadas) y muy especialmente el diseño de producción, que hace muy verídico el salto adelante de veinte años en el tiempo, logrando un realismo sorprendente.
Pero si hay algo que queda tras ver esta película es sin duda la reflexión que conlleva. Consiste en replantearse como será nuestro futuro, porque el que aquí se nos detalla parece tan posible que asusta. Con una sociedad formada por un gobierno opresor y manipulador, con la oposición que consiste en una banda de terroristas incapaz de hacer algo más que apuñalar por la espalda, la esperanza queda reducida al individuo, su fe y su suerte.
No hace falta seguir con frecuencia los noticiarios, basta con salir a la calle un poco para darse cuenta de que no vamos en la dirección correcta. Y hablo de todos. Y da miedo.
Comentarios