Director: Jay Roach
Duración: 108 minutos
País: Estados Unidos
Elenco: Robert De Niro, Ben Stiller, Teri Polo, Blythe Danner, Nicole DeHuff, Jon Abrahams, Owen Wilson, James Rebhorn, Tom McCarthy, Phyllis George, Kali Rocha, Bernie Sheredy, Judah Friedlander, Peter Bartlett, John Elsen, entre otros.
" El enfermero Greg Focker es invitado a conocer a los padres de su novia antes de atreverse a proponerle matrimonio, pero el desconfiado y celoso padre de la mujer se convierte en la peor pesadilla en la inesperada reunión del fin de semana"
En las películas que pertenecen al género de la comedia, la trama suele ser un elemento secundario. Al igual que sucedería con unas vacaciones que no fueron planificadas con antelación, el destino no es lo verdaderamente importante: lo que importa es el viaje en sí. En el caso de esta cinta ocurre justo de esa forma, el argumento resulta tan predecible por estar basado de manera muy sencilla en un cliché usado en exceso en producciones similares en producciones posteriores, aunque eso no le impide que la califique de forma más o menos positiva. Es decir, lo que cuenta aquí realmente no es la historia que se relata, sino más bien es el humor empleado en las distintas situaciones y las circunstancias en que estas se presentan, además de las actuaciones desplegadas por los protagonistas lo que hacen que el mentado viaje bien valga la pena de ser experimentado.
El elegido para conducir esta trillada aventura es el mismo hombre causante de la herida que Austin Powers infligió en la humanidad cuando hizo su aparición en la palestra de la cinematografía. Por fortuna, el director es capaz de moderar el tono en que aquella obra suya estaba construida y brindarnos un humor un poco más sutil (no mucho), pero todo intento por mejorar lo realizado con anterioridad siempre será motivo de agradecimiento. En esta historia, Ben Stiller interpreta al sujeto llamado de modo doloroso Greg Focker, quien para su mala fortuna y de forma inesperada se dirige a conocer a los padres de la mujer que ama. En algún sentido, su personaje en este filme es casi una repetición de lo que había efectuado con aquel cretino que protagonizaba la afamada cinta de 1998 There's Something About Mary. De tal forma que en esta oportunidad Greg está desesperado por causar una buena impresión en los padres de su novia y la ansiedad general que la complicada situación le provoca se va convirtiendo en una experiencia de absoluto terror cuando finalmente conoce al padre de Pam, un señor de nombre Jack Byrnes
Jack (interpretado de forma destacada por un irreconocible Robert De Niro) es un hombre parco y templado, carente de sentido del humor que en el fondo de su ser, cree estar convencido que ningún hombre podría ser lo suficientemente adecuado para su pequeña hija.
A su vez, la novia de Greg le ha hecho creer que su padre Jack es simplemente un florista que se encuentra retirado, pero pronto el muchacho descubre que Jack atesora un pasado completamente diferente al que le han contado y que es mucho más oscuro de lo que se imaginaba.
Como ya lo he dicho, De Niro interpreta el papel de manera excelente. Además fue seleccionado de manera acertada para encarnar a esa figura paterna cuya personalidad está cimentada en toda clase de suspicacia y por ende centrada en controlar todas las situaciones que se van presentando.
Más adelante, conforme los días siguen avanzando Greg descubre que incluso la charla más inofensiva en apariencia es una especie de prueba por la que debe atravesar, y siente, con justa razón, que está fallando miserablemente en ese tremendo cometido.
Lo más relevante del relato es que prácticamente todos los personajes que intervienen en esta historia se ven obligados a mentirle a otro personaje en un momento u otro. Debido a ello, gran parte del humor de la cinta gira en torno a pequeños engaños que posteriormente requerirán de aparentes confesiones repletas de otras falsedades o incluso mentiras más grandes. Aunque en realidad, los personajes la mayor parte del tiempo suelen elegir emplear mentiras más grandes para lograr salir de los aprietos en que ellos mismos han quedado atrapados. Ah, qué telaraña tan enredada suelen tejer, cuando desde un principio han decidido intentar engañar al otro.
En particular los momentos más simpáticos se desarrollan cuando vemos a Greg tratando de salir de alguna de esas enmarañadas redes que él mismo ha entrelazado o cuando lo observamos intentando hacer uso de otro movimiento torpe que enreda aún más la terrible circunstancia en la que se encuentra.
En mi caso, el tono de la película me recordó bastante a un filme de Steve Martin llamado El Padre de la Novia. Precisamente, al igual que acontecía en aquella cinta, lo previsible que se volvía la trama era un aspecto que realmente no importaba. Dicho de otra manera, es esa clase de andanza en la que desde un principio se sabe como terminará la anécdota que se supone emprende la función de trama de la obra. Por lo cual, creaciones como esta incrementan o disminuyen su calidad por la fuerza de la escritura que posean sus ocurrencias y el poder de las actuaciones de las que echan mano.
Si bien hay actuaciones que sirven como apoyo de parte del elenco y que son completamente adecuadas, la dinámica real, el vínculo preponderante en pantalla proviene de la química que brota entre Stiller y De Niro.
En resumen, no todo el cine tiene que ser reflexivo y trascendente. Desde luego se trata de una película que jamás sería considerada como una obra de arte o celebrada por su profundo comentario social. Pero habría que reconocerle que el público fue sensibilizado al ver a estos personajes representar situaciones lo suficientemente cercanas como para producir o hacerles sentir la vergüenza y la frustración que viven sus protagonistas. Vamos, por ese motivo la exitosa saga tuvo un par de secuelas que si bien no tuvieron la misma repercusión en el público o en la crítica, si les alcanzó para meterse varios millones a la bolsa sirviéndose para ello de la misma galería tan característica de personajes.
Finalmente, aconsejaría que para mayor diversión, si se presenta la oportunidad se invite a los futuros suegros a apreciarla en la sala del cálido hogar y poder así apreciar si piensan que todo el acontecimiento les resulta divertido.
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