Ayer disfruté bastante el tiempo que pasamos juntos, aunque la jornada fue corta yo sólo tenía en la cabeza que ella debía marcharse, lo cual me obligaba a dar lo mejor de mi.
Todos los momentos fueron especiales, desde verla un poco después del mediodía, hasta llevarla por primera vez a mi escuela.
No sé... en estos momentos siento que fueron 2 días distintos en uno solo, cuando la verdad es que son uno solo en el que existe una gran diferencia. En la primera parte fui dichoso, gozaba dar felicidad y recibirla y por el momento estoy lleno de aflicción, abatido y tal vez muy nostálgico.
Para empezar me gustó que me llamara e interrumpir mi descanso. Nos vimos en "La puerta del cielo" y después volvimos a mi casa por algunas cosas que había olvidado; después almorzamos mientras compartíamos algunos puntos de vista y desde luego la mutua compañía.
La cantidad disponible del tiempo era reducida, porque al sentarnos a la mesa contábamos con sólo 50 minutos para engullir los alimentos; de esos minutos alrededor de 20 o 25 quizá fueron de espera, así que la paciencia fue disminuyendo al igual que mi plazo para arribar al lugar donde estudio.
Ella propuso que la llevara conmigo a la facultad para que pudiera conocerla e inmediatamente nos "trepamos" en un taxi, ya que llevaba 10 minutos de iniciada mi clase. Hablando particularmente de ese punto, pienso que fue una excelente idea llevarla a ese lugar dado que algunos chismes baratos no tendrán más fundamento y es que, en ese colegio de apatía, se me ha involucrado sentimentalmente con diversas féminas, lo cual siempre ha carecido de pruebas.
Además pude mostrarle al "mundo" que cuento con alguien que no solo me ama, sino que también me apoya y me brinda toda su alma.
Aún sigo recordando nuestros besos afuera de ese sitio, también la dicha que me brindan tus abrazos y tus palabras de aliento. Ahora más que nunca, sé que puedo contar incondicionalmente contigo como yo lo haría de igual manera con tu persona.
No puedo dejar de pensar que deseo que estuvieras aquí, como dice la canción, pero por el momento ese deseo no puede ser concedido.
Para finalizar, de la otra parte que fue el día de hoy, sólo puedo manifestar que fue un fragmento de tristeza, de muchos "flashbacks" sobre momentos e instantes que he disfrutado contigo, de minutos que pasan muy lentamente, de canciones que vuelven a tomar sentido porque yo lo he querido así a pesar de que solía percibirlas como muy gastadas.
Fui al centro a torturarme un poco... no es cierto, fui a ese lugar de la ciudad para adquirir una revista y no pude evitar observar parejas por todos lados. Esta semana ha sido muy extraña, en determinados segmentos de tiempo ha sido como otros años de mi vida y hasta meses pasados de este mismo año.
Nuestra reconciliación, la plena conciencia de lo que es el compromiso de tu parte le han dado a mi vida nuevamente unas inmensas ganas de seguir luchando por lo qué quiero y por quién quiero y sobre todo ganas de amar y dejarme amar por ti que lo haces también, además de que ya me hacía falta.
Te sigo extrañando.
Comentarios