Hace cerca de 2 horas que te fuiste de este cuarto, hace un par de horas que deje de verte y ya siento que te extraño. Cuando las cosas no estaban yendo bien, parecía que el final estaba cerca, sin embargo como ya lo hemos visto en otras ocasiones, el lazo que nos une es muy difícil de romperse.
Estoy con una sensación extraña en el cuerpo, como angustia por saber que te vas, que me quedaré solo otra vez; emocionalmente me siento contento, tranquilo no, porque la presión ejercida sobre mi, aún no ha cesado. No obstante siempre apareces tú para brindarle un poco de luz a ese oscuro túnel.
Me he recuperado de la enfermedad que padecía desde hace algunos días, ha cambiado mi humor durante las jornadas pasadas y he vuelto a cantar.
Las actitudes han sido diferentes, se han transformado, he sido más comprensivo desde ese día que lloraba sin consuelo, repitiéndome mentalmente que lo nuestro no tenía arreglo.
Cada vez que te vas, ya sea en la calle o al otro pequeño "mundo" al que perteneciste durante gran parte de tu vida, yo lo padezco, trato de no martirizarme pero es imposible. Después de todo, la dicha de tenerte casi siempre dura muy poco.
En este cuaderno estoy escribiendo a últimos tiempos, quizá en algún instante de mi vida me apenaba, ya no me importa.
A veces pienso que para salvar mi honra, tengo que escribir, gastarme la tinta de la pluma, la energía de mis dedos con la que escribo, porque es lo único que gente que no me conoce en esencia, ha reconocido su valor, me ha dicho que vale la pena lo que hago.
Y sí, hay muchas veces como hoy que mientras regreso a mi casa voy pensando en que hago inmerso en la psicología que es una profesión muy difícil, rodeado de toda una bola de cabrones que no ayuda en nada; que tal vez pude haberme metido a letras para pulir mis habilidades, cualidades, encontrar de nuevo un estilo. Aunque creo que si lo tengo al trazar mis ideas en papel.
"Yo no le tengo miedo a la vejez, sino a algo más peligroso. No le temo ni a las canas ni a las arrugas, sino a la falta de interés por la vida". Eso decía el buen Renato Leduc(escritor mexicano al cual le valía el cliché, las morales ajenas y la suya propia y fue más cabrón que bonito, como yo).
Aborrezco las cosas formales y la seriedad. Lo contradictorio es que yo doy la impresión de ser eso: un tipo muy serio. Creo que se debe a que es complejo saber quién eres en realidad, vivimos bajo varias máscaras.
Te voy a extrañar aunque solo sean unas horas.
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