Todos resuelven un ejercicio de estadística aplicada, mientras yo, sentado muy cerca de la ventana, observo las cosas que suceden afuera sin preocuparme por lo que pasa adentro. El clima parece excelente, hay mucho sol, el cielo casi despejado ya que se asoman en él unas pequeñas nubes.
Ésta semana parece ser que incrementará el "stress" debido a la acumulación de trabajos, exámenes y algunas exposiciones... y ya que estoy hablando de exposiciones, mañana tengo una sobre capacitación y entrenamiento, es decir sobre recursos humanos. La maestra se desocupó ahora, se viene lo más complicado porque nos presionará por el ejercicio del cual he resuelto poco porque de la misma forma no he entendido nada.
Regresando al tema de capacitación, entrenamiento y desarrollo de recursos humanos; estoy un poco preocupado porque nos dieron un mínimo de tiempo para preparar un tema difícil. La única ventaja es que podemos aterrizarlo con una dinámica grupal creada por nosotros y hasta ahora nada creativo se ha aparecido. No obstante el tiempo sigue transcurriendo y el día llegará.
Por el momento sólo quiero que llegue el momento de salir de aquí porque me estoy desesperando, después de esta clase tengo que entregar un trabajo en equipo que nos costó mucho esfuerzo.
Cambiando un poco de tema, azul está atendiendo ahora a mi tía. Parece que como van las cosas va a arreglar a toda mi familia. Hace rato le avisé de los comentarios que nos dejó una persona non grata.
Sigo mirando a través de la ventana, tengo muchas ganas de estar afuera, con el sol pegándome en la cara junto con el viento refrescándolo todo. Unas tipas se pasan las respuestas del ejercicio a un lado mío y la maestra no se da cuenta.
Estoy entrando en conflicto, por una parte sé que debería estar haciendo el ejercicio, sin embargo no puedo; y por otra parte, quisiera seguir escribiendo pero no debo porque debería estar resolviendo lo que me dejaron...
... En este instante estoy en clase de Psicología Política y el maestro habla sobre la influencia de los medios electrónicos, como siempre o casi siempre mi atención está dispersa, estoy pensando en que faltan algunas horas para verte, para volver a tocarte, besarte, escucharte.
Ayer todo salió mal, compré una pluma porque tenía ganas de escribir.
Me quedé todo el día en la escuela preparando la exposición de la que ya hablé.
Le envié un mensaje y después le hablé, para darme cuenta de que la pluma no servía, no pintaba de ningún color.
La vida de repente no pinta de ningún color, solo algunas personas importantes le dan un matiz diferente, más intensidad.
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Te quiero mucho.